martes, marzo 20, 2007

martes, diciembre 06, 2005

¿Comunicador?
Definamos algo: quienes nos dedicamos a comunicar y tenemos el privilegio de tener un medio para expresar algo, es evidente que nos necesitamos alimentar de diversos medios para tener la posibilidad de informar o "comunicar" algo a los demás, ¿cierto?
¿Qué pasa cuando a un comunicador se le quitan algunas de las herramientas para hacer su trabajo? ¿Se le puede seguir llamando comunicador a alguien que carece de herramientas básicas (Circa 2005) como son los servicios de mensajes instantáneos?
Esta queja puede parecer poco fundamentada y debatida con un: "Para eso tienes el teléfono guey". Pero por simplista que pueda parecer, la neta es que el MSN agiliza los estúpidos protocolos que implica una llamada telefónica.
Un mensaje instantáneo toma su fuerza gracias a la frialdad del medio que lo concibió, y ahí mismo radica su carácter conciso.
Eso sin contar que gracias a él una empresa puede ahorrarse miles de pesos en llamadas telefónicas al extranjero.
Cualquiera que sea la razón, es ingenuo pensar que es una medida que redituará en un rendimiento mayor de los empleados de dicha empresa. Tómenme como ejemplo: al cortarme esas alas –y las que me daba también el BitTorrent y el Limewire–, buscamos nuestras diversiones en otro lado. Desde que esto ha sucedido, he ocupado las cortesías del Dave & Busters que tenía ahí empolvadas. Eso sin contar el tiempo que he dedicado a buscar medios para comunicarme y por ende, desatendido mi trabajo.
Un consejo: quienes laboramos en una empresa nos vemos orillados a considerarlo nuestro segundo hogar –las 8 horas diarias de nuestras vidas lo provocan–, así que no traten de cambiar nuestras herramientas, es como si alguien llegara a nuestra casa e intentara desarreglar el mobiliario.

martes, agosto 23, 2005

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lunes, agosto 08, 2005

Sabadito en la Perla.
Tenía casi tres años que no asistía a ese distinguido cabaret ubicado en la calle de Brasil, en el Centro Histórico de esta capirucha. El Dj deleitó ahora con joyitas del calibre de "¿Quén Pompó?" o "Dame una señal chiquita", con mezclas al más puro estilo perlesco.
Llegó la hora del "chou" y las primeras caracterizaciones estuvieron regulares (de hecho destacó más el ballet de Milton Gio local). Sin embargo, la noche se la llevó "el" última intérprete: una Celia Cruz en cuerpo y rostro de Enrique Cuenca "El Polivoz". Con enormes lentes dorados de un estilo muy parecido a los que Bono usa en el video de "The Fly", la angelita, ya entrada la última rola de su número mágico y musical, se acerca a su servidor y lo saca a bailar. Ni modo, ya entrados en chelas y en onda, no hubo de ostra que entrarle al danzón.
Más tarde, para la segunda ronda de presentaciones, nuevamente "La Polivoza" se llevó el cartel. Ahora enfundada en un vestido guinda brilloso y una peluca con peinado a la Enrique Guzmán, imitaba a doña Paquita La del Barrio para cerrar la noche... Con dos rolotas terminó aquel viaje noctámbulo lleno de caguamas de a 60 varos, sillas naranjas y sudores al por mayor.
Musikita y musikota... ¿Qué haríamos sin ti?

martes, agosto 02, 2005

5 discos para este atardecer lluvioso:
Jet Lag Dreams, de Departure Lounge
The Earth Is Not A Cold Dead Place, de Explosions In The Sky
Good Humor, de Saint Etienne
Pedals, de The Aluminum Group
Wilderness, de Archer Prewitt